Para el correcto mantenimiento y conservación de sistemas de impermeabilización deben realizarse en el caso de CUBIERTAS:
Operación | Periodicidad |
Limpieza de los elementos de desagüe (sumideros, canalones y rebosaderos) y comprobación de su correcto funcionamiento | 1 año |
Recolocación de la grava | 1 año |
Comprobación del estado de conservación de la protección o tejado | 3 años |
Comprobación del estado de conservación de los puntos singulares | 3 años |
Actuaciones NO recomendadas:
En general, no deben almacenarse materiales en las cubiertas.
Debe evitarse el vertido de productos químicos agresivos, tales como aceites, disolventes, etc. sobre la impermeabilización o sobre el material de aislamiento.
No deben recibirse sobre la cubierta elementos tales como antenas, mástiles, etc. que perforen la impermeabilización o el aislamiento o que dificulten el desagüe. En caso de ser necesario se consultará con el instalador del sistema de impermeabilización.
Conservación y mantenimiento
El mantenimiento de la cubierta comporta, en primer lugar, visitas periódicas de inspección al menos dos veces al año, preferentemente al inicio de la primavera y el otoño y en aquellas situaciones en que se hayan producido lluvias torrenciales, nieve o granizo y siempre que exista cualquier actuación de otras subcontratas.
Según informa la norma UNE 104416:2009 las actuaciones de conservación para impermeabilizaciones:
- inspección anual por parte de un experto.
- Limpieza y eliminación de hojas secas y otros materiales arrastrados por el viento.
- Comprobación de la firmeza de los elementos de anclaje o fijación al soporte, asegurando y reparando, en su caso, los defectos observados.
- Comprobación de si existen desplazamientos de parte de la protección que dejen al descubierto zonas de la membrana o aislamiento térmico sensibles a los agentes atmosféricos, y reparación de los defectos observados.
- Revisión de las conexiones, los remates y las fijaciones, especialmente el sellado y reparación de los defectuosos,
- Reparación de los deteriores producidos por esfuerzos dinámicos ajenos a la funcionalidad de l cubierta (por ejemplo deterioros producidos por falta de cuidado en obras realizadas en la cubierta), soldándose nuevas láminas de igual naturaleza, limpiando previamente la lámina instalada con disolventes adecuados.
- La conservación y mantenimiento, así como la restauración y trasformación de toda o parte de la cubierta, debe ser realizada por personal cualificado.